domingo, 17 de agosto de 2014

Inugami


- Inugami por Sawaki Suuchi -

Se trata de un tipo de Yokai, procedente de la creencia de los "espíritus animales" que son llamados para ejecutar alguna venganza o para proteger a una familia. El inugami es un espíritu perro que puede ser creado mediante ciertos métodos de la hechicería Kojyutsu (prohibida en el período Heian). Este método consistía en enterrar a un perro hasta el cuello y dejarle comida cerca, pero sin que pudiera alcanzarla. Mientras tanto, el amo debe repetirle que el sufrimiento que padece no es más grave que el que padece él mismo y su familia. Tras morir de inanición, se le debe cortar el cuello al animal para que se convierta en un inugami (literalmente "Dios Perro"). El cuello del perro se conserva como amuleto y como garantía de obediencia. Otro método es encerrar a varios perros sin agua ni comida para que se devoren entre ellos y luego cortar el cuello del animal que muera último, el cual será el inugami. Quienes poseen un inugami son llamados "Inugami-mochi"

Existen muchas historias, todas basadas en la premisa de que los perros son criaturas fieles, compañeras y defensoras del bienestar de su amo o familias, mientas que en los cuentos populares son considerados seres mágicos, a veces capaces de hablar.
Una de las leyendas más extendidas y conocidas es la de una anciana que busca venganza contra un enemigo. Para ejecutar su venganza, la anciana enterró a su amado perro en el suelo dejando solo la cabeza afuera y dijo: "si tienes alma, has mi voluntad y te adoraré como a un dios". Luego cortó la cabeza del animal con una sierra de bambú, liberando su espíritu como un inugami, quien ejecuto su venganza, pero también maldijo a la anciana por la dolorosa muerte que le hizo padecer.
En otras historias, el inugami trata de volver a su cuerpo, pero al encontrarlo inhabitable por su estado de putrefacción, opta por poseer el cuerpo de su amo. Según estas historias, el cuerpo poseído por un inugami se cura de enfermedades y dolencia, pero adopta los comportamientos caninos del animal que lo posee.

En otras historias, el inugami cumple el papel del kitsune, como un ser benigno, que da buena fortuna y puede cambiar de aspecto. A diferencia de otras historias, en estas el inugami sigue sus propios impulsos en vez de atenerse a los deseos de su amo.
La creencia en estos seres se extiende por muchas regiones de Japón incluso en nuestros días, desde Kyushu hasta Okinawa. De hecho, en los casamientos se suele verificar los arboles genealógicos para corroborar que ningún pariente fue un inugami-mochi, para evitar relacionar la familia a la brujería.

Si bien, se atribuye su origen a la fidelidad de los perros, también existe la leyenda de que proviene del Nue, un yokai que al ser derrotado por Minamito no Yoshitsune fue cortado en 4 piezas; según la leyenda, el inugami surge de una de las partes del Nue.

Yokai



- link -

Traducido como "aparición", "demonios" o "monstruo", el yokai es una clase de criatura muy abundante en las narraciones mitológicas japonesas. Dependiendo de las historias y de las épocas, los yokais pueden ser malignos o benignos, desde los traviesos kitsunes y tanukis, hasta los malvados onis, e incluso las bellas korimes (mujer de las nieves - "yuki onna"). Algunos son animales, otros poseen apariencia humanas, mientras que otras historias vemos objetos cobrar vida y criaturas amorfas o humanos con rasgos animales y viceversa. Lo cierto es que el termino "yokai" abarca un sin fin de criaturas sobrenaturales que invaden las antiguas historias, mitos y relatos mitológicos del antiguo Japón. 

En cuanto a poderes, los yokai poseen un poder físico, mental y espiritual superior al humano, lo que los hace arrogantes en muchas ocasiones y tienden a hacer maldades a viajeros. Según la creencia popular, son invulnerables a las agresiones humanas pero pueden ser derrotados por bendiciones de los monjes budistas.
Las costumbres de los yokai varías según las historias, algunos viven en zonas aisladas y alejadas de los poblados, mientras que otros prefieren habitar casas, e incluso algunos yokai prefieren los bosques, pantanos y caminos. Se sabe de yokais asesinos, amorfos y hasta capaces de tomar diversas formas.

El termino Yokai se usa para abarcar un amplio espectro de criaturas paranormales; muchas veces, a los animales salvajes, se los suele asociar a fenómenos inexplicables, acuñandoles el nombre de yokais; entre los más conocidos tenemos al Kitsune (zorro), el Tanuki (mapache), Hebi (serpiente), Kamaitachi (comadreja), Inugami (perro), Bakeneko (gato) y el Mujina (tejón).
Por otra parte, también tenemos yokais humanoides como el Kappa, una criatura de aspecto similar a un niño con características anfibias. Los onis son demonios malignos totalmente amorfos y también vemos historias de objetos inanimados que tras cumplir ciertos requisitos cobran vida, siendo llamados Tsukumogamis.

Finalmente, también vemos yokais con características y funciones demasiado específicas como para ser colocados en una categoría amplia, como el abura sumashi, un espíritu que se atraviesa en el camino de los viajeros y que bebe aceite; o el amikiri, un yokai que solo se dedica a cortar las redes de los pescadores.


sábado, 14 de junio de 2014

Ame-onna


- Ame onna por Toriyama Sekien -

Literalmente "mujer agua" o "mujer de la lluvia", se trata de un yokai femenino capas de provocar fuertes lluvias solo con lamerse la mano. Sus orígenes se remontan a antiguas deidades chinas, posiblemente anteriores al budismo.
Según la leyenda, es capas de tomar la forma de una nube durante el día y de lluvia durante la noche. Su aspecto humanoide puede ser visto solo durante las noches de lluvia y su función principal es la de proveer de agua a las plantas y los cultivos, empapando todo lugar por donde pasa. Era común responsabilizar a esta criatura por las inundaciones que afectaban negativamente los cultivos de la época.

Los agricultores chinos y japoneses suelen rezas a este espíritu para tener buenas lluvias en sus cosechas o para apaciguar su ira en épocas de inundaciones problemáticas. Si bien en China esta criatura permaneció como una deidad asociada solo al cultivo y las lluvias, en Japón, sus historias se fueron tornando cada vez más siniestras, llegando a describirla como una demacrada y aterradora mujer, desprovista del título de diosa para ser considerada una peligrosa yokai que puede ser vista las noches de lluvia lamiendo el agua que cae por su cuerpo. Según algunas historias llevo con sigo un saco con el cual secuestra a los recién nacidos que lloran durante las noches de lluvia.

- Representación de la Ame onna japonesa por Utagawa Yoshiiku (1890) -

Considerando esta alteración del comportamiento de esta criatura, se comprende como en la actualidad, los términos ame-onna y ame-otoko (equivalente masculino) son usados para señalar a las personas con mala suerte, a las cuales la lluvia parece seguirlos a donde sea que van, algo similar a lo que sucede en las representaciones animadas clásicas occidentales donde vemos la mala suerte y la desgracia representada como una nube negra y tormentosa sobre la cabeza o la casa de alguna persona desafortunada.

Tsukumogami



Literalmente "artefacto espíritu", los tsukumogami son un tipo de yokas o espíritus demonio que comprenden a los objetos inanimados que adquieren vida propia cuando alcanzan 100 años de antigüedad.

Existen muchas de estas criaturas en el folclore japones, llegando a conformar una suerte de clasificación: los tsukumogami que son sandalias o calzado en general son llamados Bakezouri; los paraguas viejos reciben el nombre Karakasa; Kameosa son los jarros de sake; las teteras reciven el nombre de Morinji-no-okama; Ungaikyo es el nombre que se les da los espejos vivientes; Zorigami a los relojes; Furu-utsubo a los biwa (instrumento tradicional japones); mientras que las espadas con vida propia son llamadas simplemente Katanas.

El comportamiento de estos objetos varía según las funciones que cumplían antes de tener vida, siendo los cuchillos, espadas y armas en general los más peligrosos y agresivos al cumplir sus 100 años. En otras historias estos objetos ven condicionado su comportamiento por el trato que recivieron de sus dueños, siendo amables si los dueños los trataron bien o malvados si sufrieron malos tratos.

Origen

Si bien podemos encontrar historias y leyendas muy antiguas sobre estos personajes, aproximadamente desde el siglo X d.c., recién en el período Edo se les dieron los nombres anteriormente mencionados y se los tomo en consideración en las producciones artísticas de la época.

En el famoso "Tsukumogami-ki"  ("Registro de artefactos espíritu"), un texto del período Muromachi (1336-1573), estas criaturas fueron usadas para difundir la doctrina Budista a todos los sectores sociales, incluyendo a quienes no poseían el nivel intelectual o social para comprender las alegorías de los textos o que simplemente no sabían leer.
Así, vemos historias donde varios objetos reciben almas después de 100 años de existencia, pero pese a su anterior condición de objeto inanimado, estos seres poseen emociones humanos, padecen sufrimientos, sienten malevolencia, piedad, maldad y codicia. Después de varios sucesos, estos objetos buscan seguir el camino de Buda, alcanzar el nirvana, el estado de iluminación para librarse de la pecaminosidad y el sufrimiento a la que las malas emociones humanas. Pero principalmente se desasían del rencor que sentían hacia los humanos que los habían abandonado y maltratado.

- Tsukumogamis varios / imagen tomada de link -

"Hemos servido fielmente a las casas como muebles y utensilios durante mucho tiempo. En vez de conseguir la recompensa debida a nuestra causa, nos abandonaron en las calles para ser pateados por bueyes y caballos [...] ¡Cuente lo que cuente, debemos convertirnos en espectros y tomar venganza!"

Curiosamente es un Tsukumogami el que interfiere en la citada venganza, un rosario budista instándolos a convertir su odio en benevolencia, solo para recibir el ataque de un garrote que lo insulta y logra sobrevivir gracias a sus discípulos.
De este modo, los tsukumogami adoptaron una función didáctica similar a la que poseían los vitrales de las antiguas catedrales góticas del medioevo europeo, de los cuales el pueblo analfabeto podía comprender la doctrina religiosa. Con las historias de los tsukumogami se buscaba una transformación, un traspaso de la tradición shintoista predominante en Japón, al Budismo durante la ocupación china. Estra transformación parte de las bases mismas de las creencias del shinto, donde todo tiene alma, desde las personas hasta los animales, objetos y plantas, haciendo de este modo un mensaje fácil de comprender y y muy cercano a las creencias dominantes de la época, simplificando el trabajo de adaptación.

El Tsukumogami-ki es considerado un texto alegórico que ilustraba las creencias budistas de un modo entretenido y hasta cómico, contando con muchos juegos de palabras indescifrables para los no letrados, quienes podían guiarse solo con las ilustraciones. Pese a esto, las clases populares, principalmente humildes y de escasa educación formal, malinterpretó el mensaje y en lugar de tomarlo como una narración alegórica, asumieron que los objetos realmente cobraban vida, aunque esto también tuvo un resultado positivo, puesto que la imaginación popular permitió divulgar las enseñansas del Budismo aunque la gente creyera realmente en la naturaleza viviente de los objetos.
Podemos ver una contraparte occidental en la historia de "El fausto" de Estanislao del Campo, donde un gaucho asiste a un teatro para ver una obra de contenido religioso y cree que lo que ve en el escenario es real y posteriormente canta a sus compañeros y a todo aquel que lo escuche los sucesos que vio en el teatro y que creyó reales, divulgando las enseñanzas católicas sin darse cuenta de ello).

A partir del siglo XIX, con la apertura de Japón al mundo y la influencia occidental, los tsukumogami pasaron a ser simples personajes de cuento, leyendas urbanas y personajes de anime.
La lista de tsukumogami ha ido aumentando con el tiempo y el trabajo de los diferentes artistas hasta la actualidad, incluso algunas producciones de anime han incorporado algunas categorías a la lista (como en "Shigoku Shojo" donde vemos a un tsukumogami que solía ser la rueda de un antiguo carro). Incluso en series como Pókemon o Digimon vemos criaturas inspiradas en plantas y objetos; incluso en los cuentos occidentales vemos ejemplos de esto, como en "La bella y la bestia" con sus utensilios parlantes, "Blanca Nieves" y el espejo mágico capas de hablar con su dueña o mas recientemente "Frozen" donde vemos muñecos de nieve vivientes.


jueves, 12 de junio de 2014

Los tres tesoros imperiales



Se trata de los tesoros más valiosos de la familia imperial japonesa. El primero es el espejo Yata no Kagami, aunque debido a que la entrada de civiles al santuario de Isa, donde se supone que se encuentra, esta prohibida, es imposible corroborar la veracidad de su existencia.

Según la mitología japonesa, la diosa Ame no Uzume colgó este espejo de un árbol para enseñar y expandir el reflejo de Amaterazu, la diosa del sol, al salir de la cueva en la cual se había confinado tras los incidentes con su hermano, Susano-o. Junto con espada Kusanagi no Tsurugi (entregada a Amaterazu por Susano-o para ganar su perdón), ambos artefactos fueron heredados por el nieto de Amaterazu, Ninigi no Mikoto para pacificar Japón. Desde entonces, fueron considerados los tesoros nacionales de la casa imperial japonesa, pasando de generación en generación.

Posteriormente, durante la era Jomon, se popularizó el uso de las magatamas, abalorios o cuentas que se usaban como indicativos de la dinastía Yamato y que pasaron a ser de uso muy común y extendido en todo Japón, incluso en la actualidad. Pero es que puntualmente nos importa es el Yasakani no Magatama, el cual también posee un origen mitológico, donde según la leyenda, el dios de la luna Tsukuyomi no Okami otorgó a la familia imperial un collar o joya (difiere según las versiones) como símbolo de aprobación del nuevo emperador. Este objeto fue incorporado como tesoro imperial en el período Heian.

En la actualidad, el Yasakani no Magatama es el único tesoro imperial original que se usa activamente en la familia imperial, del espejo y la espada solo se utilizan replicas, dejando los originales guardados en diferentes templos por cuestiones de seguridad; el espejo se dañó en varios incendios y se usaron las cenizas recogidas para armar una replica, que se usa hoy en día en algunas ceremonias. En cuanto a la espada, lamentablemente se perdió, debido a que en 1185, el clan Taira arrojó la misma, junto con el espejo, al mar desde el estrecho de Shimonoseki, tras finalizar la batalla de Dan-no-ura. Si bien la espada no puso ser recuperada, es espejo fue rescatado por buzos.


miércoles, 30 de abril de 2014

Futakuchi Onna



Se trata de mujeres maldecidas y convertidas en yokais. "Futakuchi onna" significa literalmente "mujer de dos bocas" y de tal manera era representada en los grabados de la época donde se la ve con una boca extra, generalmente en la parte posterior de la cabeza o en la nuca, usualmente oculta bajo una larga y negra cabellera.

Según la leyendas, esta segunda boca parece tener voluntad y deseos propios, puesto que exige a la mujer alimento y pronuncia insultos y agresiones, involuntariamente por parte de quien la porta. Quien padece esta maldición debe mantener esta boca bien alimentada si no quiere padecer terribles dolores originados por los alaridos de la boca extra. La futachuchi onna tiene la facultad de manipular su cabello a voluntad, facilitando la alimentación de la segunda boca.


En la mayoría de las narraciones, esta maldiciones eran lanzadas contra mujeres que negaban alimentos a sus hijastros o niños abandonados, dejándolos morir y en cambio daban gran atención y alimentación a sus propios hijos. El espíritu del niño abandonado se instalaba en el cuerpo de la mujer para cobrar venganza y causarle terribles dolores si lo alimenta. Según otras historias, esta maldición se reservaba a mujeres que no querían comer y la segunda boca comía el doble por la dos.
En cualquier caso, estas historias hacían hincapié en la correcta e incorrecta forma de alimentación, la descortesía y la desatención por los necesitados en una época en que el alimento no era abundante.

En muchas historias se considera esta segunda boca, un castigo para la avariciosas y tacañas mujeres de las clases acomodadas. Una famosa leyenda cuanta como un avaro hombre de una antigua aldea no soportaba la idea de pagar la comida para su esposa y decide vivir en soledad, hasta que un día conoce a una mujer que no comía nada e inmediatamente la toma como esposa. El esposo, fascinado por esta trabajadora y enigmática mujer que le permitía ahorrarse los costos de alimentación, no encontraba explicación a porque sus reservas de arroz disminuían notablemente, viendo que su esposa no comía nada. Fingiendo irse a trabajar, el hombre se ocultó en su casa, cerca de las reservas de arroz, y descubrió, para su sorpresa y terror, que el cabello de su mujer se movía extrañamente y dejaba a la vista una espeluznante boca en su nuca, la cual se alimentaba vorazmente de cuanto alimento encontraba su cabello, que se movía como tentáculos para alimentarla.


Nue


- Ino Hayata y el Nue" por Tsukioka Yoshitoshi -

Considerado la quimera japonesa, youkai o mononoke, los Nue son criaturas mitológicas de aspecto quimerico, una combinación de muchos animales: cabeza de mono, cuerpo de tanuki, patas de tigre y cola de serpiente. En algunas historias son capaces de volar, convertidos en una nube negra.

Se los considera criaturas de mala suerte, enfermedades y mal augurio. En el año 1153 transcurre la que tal vez sea la historia más conocida sobre Nues. En el palacio imperial de Kioto, el emperador Konoe comienza a padecer terribles pesadillas todas las noches, llegando incluso a enfermarse; al parecer, la responsabilidad del estado del emperador recaía sobre una nube oscura que aparecía en los techos del palacio cada noche. El guerrero Yorimasu Minamoto resuelve el problema encendiendo una flecha con fuego y clavandola en la nube, de donde cae el Nue muerto. Posteriormente lanzan el cuerpo de la criatura al mar, aunque según otras fuentes, el cadáver del nue flota en la bahía y los aldeanos lo entierran por temor a una maldición. Actualmente el lugar donde supuestamente fue enterrado compone un sitio turístico en Kioto.


En el anime

Vemos muchos ejemplos de nues en el manga y el anime. En la serie "Bastard!", Nue es el nombre de la espada de Arshes Nei; en el anime "Bleach", la espada Zabimaru (perteneciente a Abarai Renji) toma la forma de un Nue; en el juego "Final Fantasy XIII, Nue es una de las armas con forma de bumerang de Hope.

- Zabimaru y Renji en "Bleach" -

En el anime "Mononoke" el boticario llega a pelear con un Nue; en el anime "Ga-rei Zero" el espíritu de la espada de Yomi es un Nue.